Esta receta es un auxiliar perfecto para ayunos prolongados, tanto por su gran valor nutricional como por su delicioso sabor. Además es una excelente base para sopas, sólo debes dejar tu imaginación volar para crear algo muy sabroso.
Porciones:
Rinde: 10 tazas (2.5 Litros)
Tiempo de cocción: 4 horas (hasta 24 horas si lo desea)
Ingredientes:
2 kg de huesos de médula
1 pata de puerco de preferencia cortada en trozos
1 Kg de huesos de costilla carnosos
½ taza de vinagre
3 cebollas picadas en trozos grandes
3 tallos de apio, picados en trozos grandes
10 tazas de agua filtrada fría
Opcionales para agregar todavía más sabor:
1kg de carne de cerdo de su preferencia (Opcional)
1 ramillete mezclado con hierbas de perejil, tomillo y hoja de laurel
1 cucharada de granos de pimienta negra o verde aplastados
Preparación:
Coloca los huesos de médula en una olla grande, mezcla con el vinagre y cubre con agua fría. Deja reposar durante ½ hora o más.
Mientras tanto, coloca los huesos carnosos en un sartén de acero inoxidable. Tuesta a 350 grados en el horno durante una ½ hora. Cuando esté bien tostado, añade los huesos a la olla. Quita la grasa del sartén, añade agua al sartén, posteriormente ponla a fuego alto hasta que hierva, revuelve utilizando una cuchara de madera para quitar el jugo coagulado.
Añade este líquido a la olla. Añade más agua en caso de ser necesario para cubrir los huesos, pero el líquido no debe ser mayor a una pulgada del borde de la olla, ya que el volumen aumenta durante la cocción. Pon a fuego lento y quita los residuos que estén en la parte de arriba.
Después de haber quitado los residuos, añade vegetales, el ramillete y granos de pimienta.
Cocina a fuego lento el caldo durante al menos 4 y hasta 24 horas.
Saca los huesos con unas pinzas o una cuchara ranurada. Coloca el caldo en un tazón grande o en varias tazas Pyrex. Deja enfriar en el refrigerador y quita la grasa congelada que hay en la superficie.
Recomendaciones:
Para una sopa sencilla agregar cebolla picada, tomate en cubos y trocitos de carne de cerdo. También es una excelente base para otras sopas más elaboradas.
Mantenerlo en refrigeración por un máximo de siete días. Se recomienda hervirlo antes de servirlo.
Si no lo vas consumir todo rápidamente, lo puedes congelar en recipientes y usarlo cuando lo vayas necesitando. Consumirlo máximo en un plazo de 6 meses.